EQUO Madrid denuncia el despilfarro del Ayuntamiento de Madrid en contrataciones de libre designación y cargos de confianza, al servicio del gobierno, en tareas que tradicionalmente han estado cubiertas por funcionarios. En la mayoría de casos, además, estos nombramientos recaen en militantes, afiliados. Todo ello, mientras se recortan sueldos y derechos básicos.
Para el co-portavoz de EQUO Madrid, Ramón Linaza, “es inadmisible que, ante el recorte de sueldos a los funcionarios y a las prestaciones por desempleo, entre otros abusos, se siga considerando a los ayuntamientos como una agencia de colocación de afiliados y simpatizantes. Esta actitud de la ‘clase’ política es lo que nos ha llevado al despilfarro y a la crisis actual”, añade. Por otro lado, Linaza ha responsabilizado a las sucesivas administraciones del Partido Popular de un crecimiento sin precedentes en cargos de confianza y libre designación, que “ha incrementado el gasto en casi 20 millones de euros, desde la entrada de la Administración Gallardón en Madrid”.
EQUO Madrid recuerda que este despilfarro, junto con grandes deudas, como las obras de la M-30 o la compra de nuevos edificios, es lo que ahora obliga a unos recortes y políticas de ajuste intolerables, tanto para los trabajadores como para los servicios sociales.
Linaza señala que, en el momento que vivimos, “la tendencia de los gobiernos debería ser eliminar cualquier situación de privilegio o de gasto excesivo”. Sin embargo, en el contexto del Ayuntamiento de Madrid, “tenemos ejemplos muy claros de este corporativismo político, asociado a privilegios propios tan sólo de las élites políticas”, añade.
Esta organización política considera que es urgente y necesario racionalizar las plantillas municipales, reconsiderando el desmesurado número de cargos de confianza y libre designación al servicio del Gobierno, que han incrementado, en número y gastos excesivos, la estructura municipal. Para EQUO Madrid, el importe de estos gastos innecesarios debería dedicarse, sin ningún menoscabo para el funcionamiento de nuestra Corporación, a partidas sociales que permitan mitigar las consecuencias de la crisis económica, ecológica, social y política, que el Partido Popular se empeña en hacer más profunda.
Datos del despilfarro de los “enchufes”
Desde EQUO se recuerda que, actualmente, 162 puestos están cubiertos por eventuales de libre designación, adscritos a Gobierno y Administración, con un coste de más de siete millones de euros. Su función es prestar “asesoramiento y confianza de carácter político” a los cargos electos, cobrando cantidades astronómicas y realizando el trabajo que deberían llevar a cabo funcionarios – además, sin dar fe pública y sin poder tramitar expedientes -. En este grupo se inscriben también los asesores de los grupos políticos – 90 personas. El coste de los salarios de este personal eventual asciende a 3.500.000 de euros.
Por otro lado, deben sumarse 101 cargos directivos, designados en etapas sucesivas, desde la Ley de Grandes Ciudades, con la entrada de Gallardón, y que han sido ratificados por la Alcaldesa de Madrid, Ana Botella. Éstos realizan funciones que antes realizaban los funcionarios públicos, con un coste de unos 9.000.000 millones de euros. Sus sueldos oscilan entre los 85.000 y los 89.000 euros anuales.
Fuente – Ayto. de Madrid:
ANEXO – Histórico y Consecuencias del “despilfarro”
Los Cargos Directivos – Secretarios Técnicos, Coordinadores Generales, Directores Generales y Gerentes de Distrito -, fueron introducidos en el Ayuntamiento de Madrid por Gallardón, en el mismo momento de acceder a la Alcaldía, en el año 2003. Antes, la mayoría de sus funciones las ejercían funcionarios de alto nivel. Se accede al cargo por libre designación y sin necesidad de ser funcionario de carrera, es decir, sin oposición libre. El coste en salarios, para las arcas municipales, está cifrado en más de ocho millones de euros, a lo que habría que sumar el coste de la cuota patronal de la Seguridad Social.
Su implantación ha provocado, además, que aumente en progresión aritmética el número de funcionarios de alto nivel que dependen de ellos. Así, si en el año 2003 había unos 20 Subdirectores Generales (estos siguen en jerarquía a los cargos directivos, pero han de ser funcionarios), ahora la estructura se ha incrementado en más de 250, teniendo en cuenta los directivos y los eventuales de confianza.
En lo que afecta a los asistentes de los grupos habitualmente, son militantes de los partidos, familiares u otros cargos, y su dependencia orgánica es la siguiente: Partido Popular y Concejalías del PP: 38; PSOE: 32; IU: 16; UPYD: 4. El coste para las arcas públicas del Ayuntamiento de Madrid, sólo en salarios, asciende a más de tres millones de euros. Su existencia es anterior a la década de los noventa.