EQUO Madrid exige responsabilidades y la devolución íntegra del dinero ante el escándalo del uso de tarjetas B en Caja Madrid y Bankia

10687054_717285311653981_7346698451437640047_nEQUO Madrid ha calificado de escándalo las informaciones acerca del uso de tarjetas B por ciertos directivos de Caja Madrid y Bankia. Según la noticia, habría hasta 86 directivos y consejeros implicados, entre los que se encontrarían Rodrígo Rato, Miguel Blesa, miembros de los dos sindicatos mayoritarios, del Partido Popular e Izquierda Unida, así  como el ex presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y el ex jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno.

Los presuntos implicados en esta trama habrían tenido libre acceso a tarjetas de crédito para sus gastos personales durante un periodo de 10 años, en los que se gastaron 15,5 millones, de los cuales alrededor de un tercio se retiró  de los cajeros en efectivo y el resto se fue en ropa, viajes, restaurantes, hoteles e incluso compras en grandes almacenes.

Para la formación política esta noticia, lejos de sorprender, únicamente evidencia las profundas raíces de un sistema corrupto, opaco y sin ningún tipo de control. A través de su coportavoz Ramón Linaza EQUO Madrid ha señalado que “han estado diez años jugando con el dinero de todas las madrileñas y los madrileños. Y lo que es más grave, cuando ya sabían que Bankia iba a ser nacionalizado y que posiblemente se realizarían auditorías que podrían freno a ese despilfarro, incrementaron el ritmo de gasto para poder obtener el máximo beneficio antes de que se cerrara el grifo”.

El partido político ha querido incidir en que esas tarjetas, destinadas a gastos personales estaban al margen de la contabilidad legal de la entidad, suponiendo de hecho un sobresueldo que no tributaba en ningún caso a Hacienda, y que podría derivar también en un presunto delito fiscal y otro de apropiación indebida.

Por todo esto, EQUO Madrid ha exigido que se llegue hasta el fondo del caso, y que todo el peso de la ley recaiga sobre aquellos que utilizaron, gestionaron y encubrieron dichas tarjetas de crédito. Además, ha reclamado la devolución íntegra de todo el dinero que se gastó durante esos diez años de manera descontrolada y subrepticia.