El Arroyo de la Vega, afluente del Guadarrama, recibe desde hace 17 años vertidos fecales procedentes de la urbanización El bosque y de la Universidad Europea de Madrid. Alejandro Sánchez lo ha denunciado este jueves en el pleno de la Asamblea de Madrid y ha pedido a la Comunidad de madrid que actúe.
Según Sánchez, el origen del problema es que en la zona existía una depuradora, que fue destruida durante el desdoblamiento de la M-501, la carretera de los Pantanos, por la empresa adjudicataría y desde entonces no se ha reconstruido y la Administración no ha reclamado su reposición.
Los vertidos de aguas fecales ascienden a 450m3 diarios, el equivalente a «unos veinte camiones cisterna de los grandes» y están considerados un delito ecológico.
La confederación Hidrográfica del Tajo ha multado reiteradamente al Ayuntamiento de la localidad por los vertidos, por cantidades que suman más de 230.000 euros, y ha anunciado un contencioso a la Comunidad para que se haga cargo de estos pagos. Además, los vecinos y la Universidad han estado pagando al Canal el canon de depuración en su recibo, un dinero que, a raíz de denuncias recientes, les están siendo devueltas.
Ahora el Canal propone un recargo en la factura del agua a los vecinos de Villaviciosa, por lo que Sánchez pide a al Gobierno de Cristina Cifuentes que actúe, «para arreglar este desaguisado ambiental y evite que los vecinos paguen las consecuencias de su irresponsabilidad»..