Las ciudadanas y ciudadanos que nos hemos incorporado al proyecto político de EQUO, ante la magnitud de la crisis política, económica, social y ambiental en la que nos encontramos, ante un gobierno del PP acosado por una fundada sospecha de corrupción, que viene gobernando a golpe de decreto tomando medidas que contradicen el programa que presentó a la ciudadanía, hacemos un llamamiento al resto de fuerzas políticas y sociales para acordar una hoja de ruta que nos permita iniciar una segunda transición para salir de la crisis. Una hoja de ruta que para nosotras y nosotros pasa por la convocatoria de un Referéndum Constituyente que incluya los puntos siguientes:
- 1 Dimisión del Gobierno y formación de un gobierno en funciones
- 2 Reforma del sistema electoral para garantizar la proporcionalidad, la igualdad de condiciones de partida y las listas abiertas, de modo que cada partido obtenga tantos escaños como le correspondan en proporción a los votos obtenidos.
- 3 Convocatoria de elecciones para la formación de un nuevo gobierno representativo que gestione la nueva transición y promueva un proceso constituyente de abajo a arriba, con participación ciudadana, a través de mecanismos de democracia participativa y directa
En EQUO consideramos que este proceso es fundamental porque no podemos salir de la crisis económica sin afrontar decididamente la crisis política y ética en la que estamos, que es una crisis de confianza en Instituciones fundamentales del Estado y que requiere una respuesta audaz a la altura de la grave situación en la que estamos. Porque de la crisis se sale primero con transparencia y democracia directa para asegurar que no vuelva a suceder lo que ha sucedido. Pero al mismo tiempo es preciso iniciar una transición hacia un nuevo modelo productivo justo socialmente y en equilibrio con la naturaleza. Para ello trabajaremos cooperativamente con otras fuerzas políticas y sociales para crear una mayoría social que proponga:
Una auditoría de la deuda que permita evaluar la parte de deuda ilegítima de la deuda pública española, reducir el reembolso a su justa dimensión legítima y permitir reactivar la economía.